¿Qué es la introducción del TFG y cómo redactarla?

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El trabajo final de grado pone los pelos de punta a cualquier estudiante, eso es algo que todo el mundo sabe. Tienes que investigar muchísimas fuentes de información y elaborar diversos apuntes para arrancar con el proyecto, pero resulta que te topas con un problema bastante grande… te cuesta la introducción del TFG. No te preocupes, no es el fin del mundo ni nada que se asemeje. ¡Lee nuestro post y verás!

¿Qué es y para qué sirve una introducción?

Una introducción, para cualquier tipo de proyecto, siempre será tu punto de partida. En este apartado debes realizar una breve descripción de tu trabajo, donde presentarás el tema y el problema de la investigación. Al mismo tiempo, tendrás que señalar los elementos, métodos de investigación, motivos, orígenes, biografía utilizada y conexiones teóricas.

Asimismo, la introducción es la sección donde deberás dejar clara tu postura teórica y desde qué conceptos parte tu TFG. Esto último tendrá que ver, principalmente, con la carrera de grado que estés realizando y con el tema de investigación que hayas elegido.

Al mismo tiempo, la introducción representa el punto de partida para persuadir a los lectores de la importancia que tiene tu trabajo. Es por esta razón que, te recomendamos que la escribas intentando atraer la atención de los lectores. Para esto, puedes usar ejemplos e ideas de artículos recientes que traten el tema de tu estudio. Además, puedes usar estadísticas o comparaciones de teorías para persuadir a los lectores de la relevancia de tu proyecto.

Por otro lado, la introducción debe ser un apartado breve y conciso que no supere el 10 % de la extensión total de tu trabajo. Por ejemplo, si tu TFG cuenta con 50 páginas, su introducción debería tener, a lo sumo, 5 hojas. Esto dependerá del tema abordado, pero como mencionamos antes, la clave es que no te vayas por las ramas y se oriente la información de manera objetiva en cuanto a su relevancia.

Obviamente, la estructura y lo que puede o no llevar tu introducción de TFG puede variar dependiendo de tu universidad o tutor académico. Es importante entonces que tengas relación con las autoridades para la confección de tu introducción.

En definitiva, principalmente debes delimitar y abordar un único tema. Lo óptimo es iniciar por lo más general y concluir en lo específico. Los objetivos usualmente van en el último párrafo que destines a la introducción.

¿Cuál es el principal objetivo de la introducción del TFG?

Vamos a ver ahora cuál es el principal objetivo de la introducción de un TFG. Como mencionamos anteriormente, este es el primer capítulo en el cual deberás mencionar el propósito de tu trabajo y aclarar cuál será el objeto de estudio de toda la investigación.

Por otro lado, la introducción del TFG también tiene como objetivo dejar en claro la importancia del proyecto, en cuanto al conocimiento que se desea alcanzar con él. Esto último se puede lograr a través de la exposición de información relevante que haga referencia a teorías científicas y prácticas.

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Para hacer la introducción de tu TFG ten en cuenta su estructura

Ahora que ya sabes qué es la introducción del TFG y cuál es su principal objetivo, pasemos a ver cuáles son las partes de la estructura de este apartado. Si bien no existe una única fórmula para realizarla, estamos seguros de que las partes que te mostraremos a continuación te servirán de guía.

1. Justificación

Te recomendamos que des comienzo a la introducción de tu TFG haciendo una justificación de la elección de la temática del mismo. Para esto puedes señalar una problemática que te despierte interés para investigar y profundizar el conocimiento del tema. Aquí tienes la posibilidad de desarrollar tu postura teórica acerca de un objeto o campo de estudio poco explorado o ya explorado, pero desde otras disciplinas o puntos de vista.

Ahora bien, para darle una mayor relevancia a la justificación en la introducción, puedes pensar en las siguientes preguntas:

  • ¿Cuál es la relevancia de tu estudio?
  • ¿Qué nuevos aportes de conocimiento podrás alcanzar con él?
  • ¿Cuáles son tus motivaciones profesionales o académicas para investigar ese tema?

A partir del planteamiento de estas preguntas podrás plasmar una correcta justificación en la introducción de tu TFG.

2. Antecedentes

El segundo factor a tener en cuenta al momento de redactar la introducción es realizar una exposición de los antecedentes de tu investigación. Los mismos hacen referencia a los trabajos previos a tu proyecto con una temática igual o similar al de tu TFG. También se consideran como antecedentes todo aquel material bibliográfico que teorice el tema u objeto de estudio de tu trabajo final de grado.

Siguiendo esta línea, es importante que cada vez que hagas referencia a otros autores y fuentes de información, dejes plasmada la correspondiente cita bibliográfica. De esta manera estarás cumpliendo con una regla básica en los escritos académicos en cuanto a la obligación de respetar los derechos de los autores.

Anteriormente mencionamos la importancia de ser breve y objetivo en la introducción del TFG y lo seguimos sosteniendo. Es por eso que te aconsejamos justificar tu proyecto haciendo una selección del material más relevante. Luego tendrás la posibilidad de usar más fuentes e investigaciones en el desarrollo del trabajo.

3. Objetivos

Vamos a ver ahora otro complemento esencial para redactar una buena introducción de TFG. Se trata de hacer una mención breve de los principales objetivos de tu proyecto una vez realizada la justificación.

Continuando con la idea, te aconsejamos que intentes plasmar en uno, dos o máximo tres párrafos los principales objetivos de tus proyectos. Si tienes más de un objetivo puedes reservar un párrafo para cada uno, pero trata de no extenderte demasiado.

Recomendaciones al momento de redactar la introducción del TFG

Hay tres detalles que nunca pueden faltar en la introducción:

  • Que sea concisa y breve: la introducción de tu trabajo nunca debe ser la parte más larga, si el proyecto tiene 30 hojas calcula unas 2 o 3 para la misma. En los trabajos teóricos usualmente suelen ser más cortas, por su parte, en los prácticos si se puede extender un poco más.
  • Con información ordenada: además de que la bibliografía sea correcta ya que te vas a apoyar en ella, es necesario que vuelques la información de la manera más ordenada posible. Esto es importante porque el lector puede perderse. Una introducción poco cohesiva puede despejar por completo la atención del lector.
  • Focalizada en el tema elegido: limítate únicamente a hablar del tema relevante, ni detalles de tu vida ni experiencias personales que no tengan nada que ver.   Estos puntos deben ser conceptualizados antes de iniciar con una introducción, dando pie al siguiente segmento.
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Desde Quiero Mi TFG podemos ayudarte con la redacción de la introducción de tu TFG, así como también con la de todos sus apartados. Contamos con un enorme equipo de investigadores y redactores académicos que pueden abordar tu Trabajo Final de Grado desde cero, desde el apartado que te trae más complicaciones o desde el punto en que te encuentres en este momento.

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